UN PRESIDENTE LELO
El presidente de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, ha presentado la dimisión. Se veía venir. El presidente había sido sometido a un juicio paralelo en los medios de comunicación con los datos obtenidos mediante la comisión de un flagrante delito: la violación del secreto judicial. Paco Camps ha soportado, durante meses, años, todos los insultos, desprecios, burlas y injurias de los políticos de la oposición, de periodistas mesiánicos, de “opinadotes” plenipotenciarios de radios y televisiones y de la gente de la calle que no lo estima. ¡Sin haber entrado aún en un juzgado! Nadie ha hecho ninguna autocrítica. En su despedida Camps dice “Me voy sin rencor, sin sentimientos negativos, sin dolor en el corazón… Porque so se lo merecen…”. El autor dice que él tampoco quiere un presidente “fava” (lelo) para comandar la Comunidad.